Antes de fin de año, Brasil comenzará a instalarse propiamente en el Continente antártico, luego de hacerlo, desde 1984 (Estación Comandante Ferraz), en la Isla Rey Jorge, junto a otras allí ubicadas, ya que es este un punto relativamente cercano al extremo Sur de Sudamérica, en la denominada Antártida Marítima, en realidad unida por gruesas capas de hielo a la plataforma continental. Bautizada como Criosfera 1, estará enclavada en los Montes Thiel, en el interior y bastante próxima al Polo Sur (500 km.), con temperaturas de -35º de promedio. Allí se recogerán informaciones acerca de temperatura, viento, humedad, radiación solar, partículas y gás carbónico, que serán transmitidas por vía satelital al Instituto de Pesquisas Espaciales (INPE), en Sao Paulo.
Inicialmente se trata de un módulo dotado de sensores, que recibirá visitas de mantenimiento durante el verano austral, porque, en principio, sería demasiado oneroso para Brasil mantener una base habitada durante todo el año, y, si su desempeño es satisfactorio, se planea aproximarse con otro módulo adicional al Polo Sur. Será trasladado por vía terrestre desde Porto Alegre a Punta Arenas y luego se encargará de su transporte final la firma Antártic Logistic and Expeditions, que también apoyará operacionalmente el emprendimiento.(defensa.com)
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