El comandante del Ejército, el general Enzo Martins Peri, comentó en declaraciones al diario local O Globo que “podemos decir que ya tenemos el 60%”. En septiembre, la empresa brasileña Atech Negócios y Tecnologia, presentará el proyecto final al ministro de Defensa, Nelson Jobim. A partir de ese momento, será posible definir los primeros pasos del SISFRON, que nacen de la Estrategia Nacional de Defensa (establecida en 2008), en la que la protección de la Amazonia se presenta como una prioridad.
El SISFRON nace porque Brasil cuenta con 16.800 kilómetros de frontera seca con una decena de países vecinos. A lo largo de la frontera, Brasil linda con 570 municipios en 11 estados.
Para dar los primeros pasos, el Ministerio de Defensa contrató a la compañía Atech por 17,2 millones de reales para presentar en septiembre el proyecto. Ateche es una compañía brasileña con gran experiencia en la integración del sistemas y redes y que ha participado, entre otros trabajos, en el SIVAM (Sistema de Vigilância de la Amazonía).
Será a partir de septiembre cuando el Ministerio de Defensa definirá cómo implantar el SISFRON, cuyo coste estimado es de 6.000 millones de dólares, aunque no se descarta que sea mayor.
Hasta el momento, según reveló el general Enzo Martins Peri a la citada publicación, se sabe que Brasil precisará de radares sofisticados de corto y largo alcance, así como de equipamientos de visión nocturna, de torres de observación y transmisión de señales, de cámaras ópticas y térmicas, de observación por satélite, sistemas de entrenamiento y simulación, de UAVs, vehículos blindados para protección de fronteras, vehículos de apoyo, embarcaciones especiales y todo sistema que contribuya a encarar los desafíos que Brasil tiene por delante.
Por todo ello, la industria nacional está ofreciendo mucho apoyo al SISFRON, que además generará muchos empleos, opina el general. Existen ya grandes empresas trabajando en ello como Embraer y Odebrecht, así como Andrade Gutierrez en materia de satélites o Camargo Correa. Por su parte, durante LAAD, empresas extranjeras procedentes de países como China, Italia, España o Israel mostraron interés por el sistema.
Los problemas en las fronteras son básicamente el contrabando, tráfico de drogas, armas y munición, robo de carga de vehículos, refugio de criminales y crímenes ambientales. En menor escala, se producen robos de ganado, tráfico de personas, explotación sexual infantil, evasión de divisas, entre otros.
La Amazonia es la prioridad, después el centro-oeste y seguidamente el Sur. Brasil cuenta con 27.000 efectivos de personal en la región de la Amazonía y una vez se encuentre en marcha el proyecto del SISFRON los efectivos necesarios serán de 35.000 personas. El SISFRON además ayudará a promover la integración regional, estimular la cooperación militar con los países vecinos, ayudará a la preservación ambiental de la región de la Amazonía, proteger a la población indígena y aumentar la sensación de seguridad en el área.
“Al final del proyecto tenemos que trazar un cronograma de desembolso del que se encargará el Ministerio de Defensa”, explica el general, así como de la involucración de áreas estratégicas del Gobierno. El SISFRON nació durante el Gobierno de Lula y cuenta con operaciones de crédito externo, acuerdos público-privados. Eel plazo es de diez años para su implantación.(infodefensa)
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